Las historias crean vínculos

Dado que todo el mundo actúa de acuerdo a su narrativa interna, les voy a contar una breve historia de mi ciudad.

Cuando las radios de Frecuencia Modulada aún no existían, la radiodifusión precedente de noticias y música se realizaba a través de un cable. De esta manera la transmisión llegaba a los hogares y empresas.

La distancia máxima de transmisión por aire de una radio FM puede ser de hasta 100 kilómetros, dependiendo de las condiciones y de la antena. 

Vale decir, en aquellos años, la radio por cable era un concepto similar al de la televisión por cable.

Si bien la narrativa siempre ha sido una herramienta fundamental en la comunicación humana en el pasado, aún hoy la televisión y los contenidos multimediales que encontramos en internet aplican esta idea de contar historias convirtiéndose en un motor para conectar emociones, construir identidad de marca y generar impacto de audiencias.

O sea, la comunicación empresarial sigue basándose en la conciencia emocional tan necesaria para poder transmitir adecuadamente nuestros pensamientos a quienes nos siguen, como receptores de nuestros mensajes.

Era común observar en los comercios, instituciones y domicilios particulares una caja plástica con la leyenda “Emisora de Audio Frecuencia en Servicio Comunitario” que contenía en su interior un parlante (sonido monoaural) y en su exterior un solo comando. El potenciómetro permitía darle volumen de audio a una señal que provenía por el cable y que se transmitía en un horario restringido.

Me quedé pensando: Si bien las radios hoy poseen sonido estereofónico ¿Mi teléfono es compatible con el sonido estéreo?

Si bien lo técnico como lo emocional es importante, lo ideal es encontrar un equilibrio entre ambos. En Radio del Libertador, a pesar de tener un sonido monofónico, la pluralidad de palabra permitió relacionar a la emisora de manera efectiva con su audiencia local.

Por entonces, las emisoras por cable eran Radiodifusora Bolívar y Radio del Libertador.

Esto es, la narrativa no es un complemento en la comunicación empresarial, sino su columna vertebral. Al integrar historias y voces distintas que conecten con valores, emociones y propósitos, las marcas trascienden el mercado y se posicionan como referentes culturales.

Recuerdo en una época, las transmisiones de Radio del Libertador daban inicio con un programa agropecuario, para luego continuar con un magazine de noticias. Por la tarde los espacios eran más bien musicales. En horario vespertino se escuchaba un popular programa deportivo, posteriormente retomaba protagonismo la música y finalmente, antes de la medianoche los equipos se apagaban.

En resumen, conocí uno de los varios significados que tiene la expresión “silencio de radio”. Apenas podría imaginar compartir tanto de mí, durante tanto tiempo con otras personas a través de un medio.

Hay magia a través de nuestros oídos, no sólo en nuestros ojos.

En otras palabras, 24 horas era mucho más que un día de radio. Aunque ponderando ciertos acontecimientos allí vividos, esos mismos días para mi serán eternos.

Buscar un disco de vinilo en la discoteca, extraer una novedad impresa en papel amarillo de la máquina de noticias, limpiar los cabezales con alcohol, poner en punta los cassettes de publicidades, escuchar el previo, chequear el retorno en el híbrido telefónico, monitorear la señal de aire y encender el micrófono para dar lugar a la palabra de los protagonistas locales.

Esto es, neurociencia y emociones: El secreto de la narrativa.

Existen estudios que demuestran que las historias activan la oxitocina (apego emocional y comportamiento social) y la dopamina (motivación, placer, movimiento y aprendizaje) lo que fomenta la memoria y la conexión con la marca, en este caso la emisora de audio frecuencia. Lo descripto está utilizando un recurso válido que es evocar la nostalgia y felicidad, donde posiblemente muchos consumidores (oyentes activos que fueron parte de la audiencia) se ven reflejados en una historia personalizada.

Para aquellos que tienen en la cabeza experiencias brillando y no canas, entonces seguramente a finales de los 80´ recordarán que existían medios comunitarios que tenían como objetivo promover la participación ciudadana, fortalecer la libertad de expresión y colaborar con el desarrollo de la comunidad.

A través de las radios por cable, se daba voz a los ciudadanos, se respetaba la pluralidad de opiniones, se solucionaban inquietudes sociales, se difundían novedades educativas, culturales, sociales… y sobre todo se generaba la participación popular.

Los responsables de los programas radiales mayoritariamente eran periodistas, y en numerosas ocasiones aficionados.

Por entonces, sobraba talento y miradas entusiastas sobre la radiodifusión.

Muchas veces pienso que una carrera profesional no siempre es la única puerta abierta al saber. Ayer en los estudios y controles de radio se recogía el máximo saber de su tiempo. Se ejercía la comunicación, que no era ajena a los cambios constantes a nivel provincial y nacional.

Encuentro cierto beneficio hoy con internet… el conocimiento es abierto y está al alcance de todos aquellos que tengan conexión.

En este punto, la autenticidad es crucial: Si lo que estoy escribiendo es incoherente, este texto puede dañar mi reputación. La transparencia y coherencia entre la historia contada y los hechos debe ser real para evitar prácticas de marketing engañoso.

Por ejemplo, muchas veces las empresas publicitan sus objetivos y valores sin cumplirlos realmente. La consecuencia es que las personas percibirán a la organización como hipócrita.

En un entorno digital saturado, la narrativa sigue siendo la herramienta más poderosa para construir conexiones significativas y duraderas.

Si estás interesado en conocer un poco más sobre “El Poder de la Narrativa en la Comunicación Empresarial”, sugiero visites mi Blog https://adrianituarte.com/blog/

Ser curiosos y estar despiertos a los cambios genera conocimiento. Recomiendo aprender, siempre será nuestra mejor inversión. A través de los talleres intento que otros puedan construir su propio camino.

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Pd:/ ¿Qué hechos o a quienes recordás de las radios por cable?